martes, 21 de julio de 2009

FRANK McCOURT

Acaba de llegar la noticia de la muerte del escritor estadounidense, emigrado en su infancia a Irlanda, Frank McCourt. Quizás no sea una de la figuras de la literatura, pero baste recordar su primera obra “Las cenizas de Ángela” para retener en la memoria aquel texto que fue un impacto mundial cuando se publicó.
Era el año 1996 cuando se publicaba en su país natal esa obra que relataba la infancia de Frank en las condiciones más miserables en Irlanda. “Cuando recuerdo mi infancia, me pregunto como pude sobrevivir siquiera. Fue una infancia desgraciada, se entiende: las infancias felices no merecen que les prestemos atención. La infancia desgraciada irlandesa es peor que la infancia desgraciada corriente, y la infancia desgraciada irlandesa católica es peor todavía”. De esta manera comienza las memorias de McCourt. Ángela es la madre de Frank y no tiene dinero para dar de comeré a sus hijos, su marido Malachy trabaja poco y cuando trabaja el sueldo se lo bebe. Es un libro lleno de desgracias, de muerte y dolor, pero a su vez contiene pasajes de un humor que te hace sonreír entre las lágrimas que de vez e cuando te afloran en los ojos.
Por este libro recibió el Premio Pulitzer y después de este escribió otros dos que son continuación, “Lo es” publicado en 1999, donde narra el viaje americano de Frank, que va desde su desembarco en Nueva York a los 19 años hasta que es admitido en la Universidad, a pesar de que apenas había ido a la escuela, y “El profesor” publicado en 2005, donde ya inicia la actividad académica para la cual no había sido formado. Hay en este libro una anécdota que nos da idea de lo que en el menester educativo le surgió. Al incorporarse a la Universidad la dirección y sus compañeros del profesorado le hacen ver la necesidad de imponerse al alumnado, es mejor asustar que parecer débil. En su primer día de clase un alumno lanza un bocadillo a otro compañero. McCourt le recoge del suelo, le quita el papel, lo huele y se lo come ante una clase atónita.
También escribió un cuento titulado “Ángela y el niño Jesús”. Un cuento de Navidad lleno de amor y encanto. Se publicó en 2007. En este relato nos habla de Ángela, que vive en la gélida Limerick, tiene seis años y piensa que el niño Jesús que está en la Iglesia debe pasar frío y ni corta ni perezosa coge la imagen y la lleva a su cama par que no pase frío. Su hermano la descubre y cuenta a su madre, cosa que ella no cree. El párroco denuncia la desaparición a la policía.
Uno de sus grandes demonios fue su educación católica de la que tardó “muchísimo” en liberarse, criticó sin duda el nacionalismo irlandés, del que acabó hastiado. Al fin y al cabo la iglesia católica irlandesa es la causa de la construcción de la Irlanda nacionalista.
Creo que el mejor homenaje es leer sus libros. Gracias

lunes, 20 de julio de 2009

MILLENNIUM

Fin, he terminado el último tomo de la trilogía y debo confesar que me encuentro vacío, estaba ansioso de conocer el final pero al mismo tiempo me daba miedo por que sabía que era la conclusión de una aventura, de un suceso que marca mi vida. No soy exagerado, cada obra, cada libro que te “engancha”, significa (al menos para mí) una parte importante de mi vida, me deja marcado, es un bagaje importante.
Esta trilogía me interesó desde el principio, me parece literatura “mayor”, está muy bien escrita y va más allá de lo que pueda ser novela negra, esa novela de investigadores, de detectives, es más. Stieg Larsson nos habla de los entresijos del estado, de la corrupción, de la mierda que nos circunda y que nos mantiene en ese limbo y que dicen se denomina “sociedad del bienestar”.
Stieg Larsson murió antes de ver publicada su obra, era un experto investigador de los vínculos que en su país, Suecia, mantenía la extrema derecha con el poder. Era un tipo incómodo, y murió de un ataque al corazón cuando llegaba a su lugar de trabajo. Hay mucha gente que se reivindica la posibilidad de que fuera asesinado, algunas veces me acerco a esas ideas.
Ahora su obra ha llegado a su fin, acabo de leer el último libro de la trilogía, ahora se que Lisbeth Salander, Mike Blomkvist, Erika Berger, y los demás protagonistas de esta obra no volverán a contar sus historias. Lo mismo me paso cuando falleció Manolo Vázquez Montalbán, me vi huérfano de las posibles historias de su detective Pepe Carvalho. Ahora solo me queda las novelas de Andrea Callimeri y su comisario Montalbano (en homenaje a Vázquez Montalbán).
Parece que el fenómeno Larsson ha producido un boom de la literatura escandinava, esperemos a ver a estos autores y poder leer de la misma manera apasionada que he hecho con Millennium.
En todo caso mi agradecimiento a Larsson por haber convertido sus más de dos mil páginas en momentos de placer.

miércoles, 15 de julio de 2009

DALILAH Y RAYAN

Hace un par de semanas nos llegaba la triste noticia de la muerte de Dalilah, la primera víctima de llamada gripe A (H1N1). La fotografía de esta joven, de una mujer bellísima, fue portada de periódicos y televisiones. Presuntamente hubo fallos, negligencias quizás, la familia habla de varios intentos de ingreso en hospitales y una mucha dejadez en la atención. Según comentan era una persona deportista, dudan de la enfermedad que se atribuye como una de las causantes del agravamiento, asma. Es “curioso” que con una enfermedad así pudiera ser una deportista, pero así era. Debo de reconocer que esa imagen me impactó, era una chica de esa belleza moruna que hace honor a su estirpe. Poco antes de su óbito pudieron salvar la vida del hijo que esperaba, problemático parto de un pequeño a las veintiocho semanas de gestación. Ella falleció, pero quedo, sobre todo para su doliente marido la posibilidad de ver crecer el fruto de su cariño.
Pasan un par de semanas y la desgracia se vuelve a cebar con esta familia. Un error médico, otra negligencia fatal, priva de la vida al pequeño Rayan. ¿Qué había hecho la criatura para caer en manos de tanto inútil? Nada, como siempre, la desgracia se ceba con los desgraciados, es una sentencia.
Ahora todos son pésames, mesarse cabellos, buscar “culpables” (sería mejor encontrar a los responsables), etc... La pregunta surge, ¿cómo se puede cometer tal error en administrar la alimentación a una criatura y no ver primero como debía ser aplicada?. Y entonces nos acordamos de que la enfermera encargada era el primer día en una unidad muy especializada, que estaba sola, que falta personal en la sanidad pública (y en otros sectores de la administración) que las bajas no se cubren, etc, etc.
Y vemos que se hace negocio con todo, que la deshumanización del sistema es evidente, que se privatizan servicios esenciales, que siempre pagan los mismos. Hospitales, Residencias de la 3ª Edad, Colegios y otros Servicios Sociales son susceptibles de convertirse en negocio.
Mando mis condolencias a la familia de Dalilah y Rayan, a ese marido y padre, Mohamed Mimouni, al que han arrebatado parte de su vida.

viernes, 10 de julio de 2009

LA SOLEDAD

Cuando se convierte
en tu compañera inseparable,
cuando te corteja
desde el alba hasta el ocaso.

Cuando comparte
tu cama,
cuando desayuna y cena
como sombra inexorable.

Cuando es la solícita
oyente, que no entorpece
tu caminar.

No te queda
más remedio que
enamorarte de ella.