Tarde de otoño, gris, ventosa y desangelada. Propicia para le lectura, para repasar artículos amontonados en la mesa. Hace días que el Sahara ha desaparecido de la primera línea de los informativos. Marruecos sigue ejecutando su propósito de aniquilar al pueblo saharaui. Amenaza con avanzar en masa sobre Melilla y/o Ceuta, años han pasado desde la llamada “marcha verde”. Da igual, el dictador monarca alahuita es el hermano menos de nuestro (o vuestro) jefe de estado, al final los intereses económicos son más importantes que la defensa de la dignidad de la defensa de un pueblo. Pero no es el tema que me ha empujado a escribir estas líneas, quizás sea un destello de nostalgia cuando recuerdo un viaje frustrado a Marruecos. Un viaje que me propuso una querida amiga y que (como es costumbre) quedó en vana ilusión. Indago en la música que me emociona y encuentro la de un cantor que hace años nos abandonó (con la gente que sobre siempre se van los mejores) y que el día 19 de este mes se cumplen el décimo aniversario de su muerte. Aquí va la letra de esa remembranza de algo que pudo ser y no fue. Dedicada a esa personita tan especial y a Carlos Cano.
Sonata de luna en Marrakech
Te conocí de noche en la ciudad
de la adelfa blanca,
por la calle dormida donde
los hombres muerden las flores.
Yo cantaba al diablo con la barbuca
por la muralla.
Cantaba como un gato
por la Medina de Marrakech.
Estabas tan vistosa y yo
tan loco de madrugada,
buscando entre las sombras
la melodía de los recuerdos,
en aquella taberna donde
la luna solo era un sueño,
el sueño que tu boca
contra mi boca puso de pie.
Ah
Como una estrella
Ah
Cayó del cielo
Ah
Con dos palabras
Ay, Te quiero.
Y todo el mar dentro de tí
y todo el mar fuera de mí.
Quien tiene prisa, muere,
canta la luna por el desierto,
yo lo aprendí en tu boca
en una noche turbia de besos.
Buscando en la Medina
el corazón de la adelfa blanca,
por la calle dormida
donde tus ojos yo me encontré.
Ah
Como una estrella
Ah
Cayó del cielo
Ah
Con dos palabras
A...y, Te quiero.
Y todo el mar dentro de tí
y todo el mar fuera de mí